LÓBULOS RASGADOS

El lóbulo de la oreja es la parte inferior libre del pabellón auricular que carece de soporte cartilaginoso. En él se practica la perforación para la colocación de los pendientes. Cuando se produce un peso excesivo de los pendientes o a un traumatismo por tracción, estos agujeros se rasgan. No ocurre en todas las personas ya que está ligado a la laxitud propia del tejido de cada paciente. En muchas ocasiones es la acción de la gravedad, el agujero va aumentando de tamaño dejando pasar todo el mecanismo del cierre del pendiente de un lado al otro inicialmente, que de no ser tratado va rasgando progresivamente el lóbulo hasta hendirlo en dos mitades.

TRATAMIENTO

Es un procedimiento ambulatorio que dura menos de media hora y que se realiza mediante anestesia local. Como todo acto quirúrgico, su realización en un quirófano maximiza las condiciones asépticas (de limpieza) y de seguridad para el paciente (permitiendo la monitorización en todo momento de su estado).
Consiste en refrescar los bordes de la zona rasgada, para posteriormente suturarlos, tanto en la zona anterior como en la zona posterior.
Para dormir la zona quirúrgica se utiliza anestesia local que normalmente se inyecta mediante una única punción un centímetro bajo el lóbulo de forma que bloquea el nervio que recoge la sensibilidad del lóbulo (n. auricular mayor).
En aproximadamente una semana se retiraran las suturas y se colocará un pequeño esparadrapo de papel, para ayudar a una buena cicatrización. La reincorporación laboral es inmediata.

¿QUE OCURRIRÁ AL LÓBULO?

Tras la reconstrucción del lóbulo quedarán unas cicatrices, normalmente muy finas que irán mejorando con el tiempo, haciéndose prácticamente imperceptibles. El proceso de remodelación cicatricial puede durar más de un año. La cicatriz quedará oculta, al menos parcialmente, cuando se coloquen de nuevo unos pendientes. Las cicatrices están tanto en la parte anterior como posterior del lóbulo.
Trascurrido un mínimo de un mes se pueden realizar nuevas perforaciones. Es aconsejable que se realicen fuera de la zona de la cicatriz, ya que esta es más débil que el tejido normal.